Uriarte Talavera, un taller tan antiguo como México
Este lugar resguarda la tradición de la talavera poblana desde hace mucho tiempo y está lleno de historia y arte
Por Sebastián Zelaya C
Pocas artesanías son tan icónicas para un estado mexicano como lo es la talavera para Puebla. Al tipo de cerámica al que pertenece se le llama mayólica y se originó durante el periodo Morisco en España. El diseño de la mayólica poblana típica en azul cobalto tiene como influencia la cerámica de la dinastía Ming de China (1368-1644). Estas artesanías llegaban a México por Acapulco en la famosa Nao de China y fue así que, en Puebla, cuando los monjes enseñaron a los indios a producir la Talavera para decorar las iglesias, se copió y adaptó el estilo de los jarrones Ming a las usanzas Novohispanas.
Grafismo inspirador
El aspecto de la Talavera poblana, brillante y contrastante por el efecto del azul sobre el blanco, ha cautivado al mundo y ha sido tomado muchas veces como inspiración en el mundo de la moda: en 2013, el diseñador francés Jean-Charles de Castelbajac presentó una colección en la que las prendas estaban impresas con un efecto de mosaico que para cualquier mexicano evocaría el Sanborns de los azulejos. En la exhibición del MET “China: Through The Looking Glass” se presentó un vestido hecho totalmente de fragmentos de porcelana Ming rota, y al menos otros tres vestidos (incluyendo un McQueen) estampados con el mismo grafismo en azul cobalto. Aunque estas inspiraciones vinieron de otra cultura, el diseño único de nuestra Talavera pertenece a la misma estética de la cerámica Ming que el mundo admira.
Los maestros de la talavera
Antes de la guerra de Independencia, había 46 talleres de Talavera, quedando sólo 7 después. Uno de ellos es el Taller Uriarte Talavera, un ícono de esta artesanía y del estado en sí.
La familia Uriarte lo adquirió en el siglo XIX y ha funcionado sin detenerse desde entonces. Con casi 200 años, este taller es uno de los más importantes y mejor mantenidos; muchos de sus artesanos son fieles a los Uriarte desde hace décadas. La denominación de origen es un orgullo, por eso la elaboración de las piezas cumple con las normas del Consejo Regulador de Talavera que indican los procesos, herramientas y materiales que deben utilizarse.
Mantener viva la tradición
Uno de los retos del Taller Uriarte es la modernización del negocio, por lo que las colaboraciones con artistas como Pedro Friedeberg y el diseñador Lance Wyman, son fundamentales para traer esta artesanía al siglo XXI. Encontrar jóvenes que quieran aprender el oficio es difícil, pero representa el futuro del Taller Uriarte y de la talavera de calidad.
Con una historia como la de México, llena de extraordinario arte mestizo y nacionalismos, no sorprende que la talavera sea conservada en museos como el Metropolitano de Nueva York y admirada como un ícono de nuestro país. De un número limitado de talleres certificados, el taller Uriarte Talavera es sencillamente uno de los mejores; un auténtico guardián de la historia, que con su trabajo, hace honor a la tradición.